La aparición de modelos masivos del lenguaje en los últimos tiempos ha supuesto una revolución en diversos ámbitos, entre los que cabe destacar la lingüística. Si las máquinas son capaces de hablar, puede pensarse que estas son cada vez más humanas y, en caso de que esto sea cierto, es posible que en el futuro sean capaces de pensar por sí mismas y tomar decisiones.