Sobre si la inteligencia artificial acabará o no quitándonos el trabajo y a dónde llegará en los próximos 10 años hay mucho escrito. Desde el equipo de robótica de Google quieren que los robots sean aún más autónomos, y ya andan trabajando en un modelo para que puedan escribir su propio código. Esto abre las puertas a que los robots puedan ejecutar tareas más complejas con la expresión completa de lenguajes como Python.