Datos personales tan jugosos como el email o el número de teléfono corren por la ‘Dark Web’, ya que son el caballo de Troya que permiten conseguir acceder a otra información privada más sensible si cabe, como por ejemplo la bancaria, mediante técnicas como el phising. Nadie quiere que su correo electrónico acabe en la ‘Dark Web’ pero el primer paso para tomar medidas es saberlo…y Google lo pone muy fácil con su nueva herramienta de informes de la Dark Web para suscripciones de pago a Google One. Pero si no pagas por el almacenamiento en la nube de Google no hay problema, ya que dispone de una versión limitada para buscar tu dirección de correo en la dark web: la hemos probado y nos hemos llevado una desagradable sorpresa.