El anuncio de un grupo de investigadores de un método para romper teóricamente –que no en la práctica– la seguridad de las claves RSA-2048 mediante computación cuántica ha dejado algunos ecos resonando por ahí. El caso es que el método que explican es tan complicado, extraño y poco práctico que desde luego no parece que haya ningún problema de seguridad con el RSA a corto plazo, principalmente porque siguen sin existir ordenadores cuánticos con qubits suficientes o alternativas para reemplazarlos.