La guerra digital volvió a mostrar su cara más devastadora. Un proveedor europeo de servicios de defensa frente a ataques DDoS fue víctima de una ofensiva masiva que alcanzó los 1,5 mil millones de paquetes por segundo (Bpps), una de las mayores tasas de envío de paquetes jamás registrada públicamente. El ataque, según confirmó la empresa de seguridad FastNetMon, se llevó a cabo con el objetivo de dejar inoperativos los sistemas de un scrubbing center, instalaciones dedicadas a limpiar el tráfico malicioso en situaciones de denegación de servicio.