A pesar de la importancia de utilizar contraseñas seguras y gestores de contraseñas que nos ayuden a recordarlas, la mayoría de usuarios sigue usando la misma contraseña en todas partes. Lo peor es que generalmente sería posible averiguarla en cuestión de segundos, con los riesgos que ello conlleva. De hecho, la contraseña más usada en España puede romperse en menos de un segundo.